Thriller español de Movistar + que nos deja mucha tensión, mucha acción y sin duda, mucha reflexión.
miniserie de 6 episodios, creada por Isabel Peña, y Rodrigo Sorogoyen, ambos guionistas junto a Eduardo Villanueva, es un drama policiaco y thriller de acción que narra la historia de un grupo de Antidisturbios que, tras la muerte de un hombre durante la realización de un desahucio, se ven envueltos en una trama complicada. Se preestrenó en el Festival de San Sebastián y después se estrenó en movistar + el 16 de octubre.
Interpretada por Raúl Arévalo, Álex García, Hovik Keuchkerian, Roberto Álamo, Raúl Prieto Patrick Criado y como protagonista femenina Vicky luengo, es una serie que, según sus creadores, tenía el objetivo de mostrar una mirada muy personal sobre la controvertida figura de los agentes antidisturbios y su papel en nuestra sociedad.
Y aquí se ha abierto la controversia. En ocasiones, el error de generalizar desde una visión reduccionista de las situaciones, genera ruido. Porque ¿Dónde hemos dejado los matices que nos permiten empatizar y comprender los grises? La crítica la ha polarizado, anti realista o mejor serie del año. Seguramente ni lo uno ni lo otro.
Isabel peña y Sorogoyen, comentaban en la presentación de la serie que uno de sus objetivos era ahondar en los personajes mediante los temas en los que querían poner el foco como son el machismo, la corrupción, la violencia o la inmigración.
Conforme avanza la trama se nos muestra un sistema corrupto, lo que hace motivante la serie y aunque contarnos esto no es nuevo, si es interesante cómo la serie lo construye basado en personajes reales. Nos cuenta una España real, tramposa, corrupta y poco transparente.
La serie es una oportunidad de empatía, de poder entender mejor el trabajo de los agentes antidisturbios, del riesgo que corren y lo estresante que es. Utiliza un enfoque de cámara innovador, mostrando énfasis en los momentos de tensión, de acción, traspasando al espectador la sensación de angustia que viven los personajes en cada momento. La escenografía y la fotografía es un acierto, especialmente en las escenas de violencia, que resultan muy reales.
Tiene buen ritmo, engancha y te mantiene atrapad@. La serie gana conforme van sucediéndose los capítulos. Va de menos a más. Si consigues ver los matices de los personajes, y la idea global de las temáticas que quieren expresar los creadores en su contexto, es una serie muy disfrutable.